En este primer episodio hablaremos de los mitos culturales que limitan las capacidades musicales y que no nos permiten convertirnos en prodigios.

La historia de la humanidad está llena de mitos, pero respecto a ciertas disciplinas artísticas estos mitos se han enquistado profundamente, forman parte de nuestra cultura. En la música encontramos los siguiente mitos:

- El músico nace, no se hace.
- El "gen" musical.
- El mito del oído musical
- El mito del niño prodigio.
- El mito de la sordera musical

Aaron Copland, compositor norteamericano, escribió en 1939 el libro "Cómo escuchar la música". Es un libro de gran interés para la divulgar la apreciación musical, pero hay un fragmento que nos enfada mucho:

“Hay, sin embargo, un mínimo exigible al auditor inteligente en potencia: que sea capaz de conocer una melodía cada vez que la oiga. La sordera musical, si es que existe, consistirá en la incapacidad para reconocer una melodía. Quien la padezca es digno de lástima, pero nada se puede hacer por él: es tan inútil para la música como el daltónico lo es para la pintura.”

No podemos estar más en desacuerdo con lo afirmado por Copland, ya que el oído musical es algo cultural, se aprende al estar en contacto con la música, así que cualquier persona que haya escuchado música a lo largo de su vida a podido desarrollar el oído musical.

Conclusión final: todos somos prodigios de la música en potencia.

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