9. DIOS ES INMUTABLE Santiago 1:17. Esto significa que Dios nunca cambiará. Que no se muda, no crece, ni se disminuye. Él le dice que lo salva y eso no cambiará.
Santiago 1:17
Toda buena dádiva y todo don perfecto proviene de lo alto y desciende del Padre de las luces en quien no hay cambio ni sombra de variación.

Este atributo es importante entenderlo para afirmar en nuestra mente y corazón que tenemos un Dios que es firme en su palabra y sus promesas. Nosotros somos los que cambiamos. Hoy podemos hacer una promesa de seguirle y de servirle y mañana caemos en una tentación y nos apartamos de él, o pasamos por un problema con un hermano de la iglesia o vemos un al ejemplo de algún líder y entonces dejamos de creer en Dios. Cuando Dios nunca cambia! Por eso pongamos la mirada en Dios. El lo que dice lo cumple y si el dijo que estará contigo, creeme, si te adopto como su hijo creelo y no te acerques a él como un extraño! Por eso declara las promesas de dios sobre ti. La salvación para tu familia, liberación de opresiones en su nombre, sanidad de tus dolencias, etc. El no cambia.

Esto nos lleva hacia el último atributo de muchos más, pero el siguiente se escucha simple pero es uno que es su naturaleza. Así como Dios es amor, ¡Dios es bueno!


10. DIOS ES BUENO Salmo 107:1-3; Tito 3:4.


No porque haga cosas buenas solamente, es porque él es así por naturaleza! En él no hay maldad.
¡Alaben al SEÑOR, porque
es bueno;
porque para siempre es su misericordia!


Dios es bueno y salva a los pecadores, pero cuando las personas son rebeldes al llamado de Dios él se entristece.

Cuando Dios permite que la maldad abunda y tome control de personas o sociedades no es porque el sea malo sino porque esa persona o sociedad han tomado la decisión de alejar a Dios de sus vidas, le dieron la espalda, optaron y eligieron negar al señor y renunciar á sus bendiciones.
Aun el Señor les enviaba mensajeros, predicadores y profetas que anunciaban al pueblo las consecuencias de apartarse del señor. No porque él quiera tenerlos subyugados bajo terror y miedo, sino porque son consecuencias naturales de apartarse del bien. Si no hay luz quedan las tinieblas. Si no hay calor el frío invade el lugar. Si no hay orden queda el caos.

La parábola del hijo pródigo representa a dios y la humanidad. El padre tenía dos hijos y el menor decidió irse de la casa y malgastar su herencia. Aquí vemos a un padre que todos los días esperaba en la puerta de la casa y miraba por la ventana todos los días esperando que su hijo regresara. Nunca fue a buscarlo porque respeto su decisión, pero cuando lo vio regresar después de mucho tiempo, lo vio desnutrido, débil, derrotado, pobre y miserable. Pero el padre corrió a abrazarlo, y , así maloliente, lo beso e inmediatamente mandó a traer el mejor vestido, le puso el anillo que lo identificaba como hijo heredero y mandó a hacer un banquete y celebrar su regreso, olvidando que derrocho los bienes, ofende al padre, menosprecio las comodidades y protección del hogar, ofendió a su familia, etc. etc. etc. PERO el padre bueno no vio eso sino que vio la oportunidad de redimir, perdonarlo, y antes afirmar el corazón humillado y quebrantado de su hijo, afirmar esa alma insegura y confundida. Restaurarlo a su posición inicial y darle una oportunidad más.

Te animo para que escuches estos atributos una vez más y especialmente cuando te encuentres confundido, triste o tentado a dejar al Señor, no olvides que tienes un podcast, la radio por internet de tu iglesia para que refresques este conocimiento de los atributos de Dios y afirmes tu fe, y no olvides el dios tan bueno que tenemos. No se compara a nada de los deleites que ofrece el mundo ni los otros dioses y religiones del mundo.

Comparte este episodio y esta serie con alguien en tus redes sociales, cuentale a un hermano o hermana de la iglesia lo que has aprendido y ayúdale a encontrar el podcast para que lo escuchen los que no lo han encontrado todavía.

Sintonizate la próxima semana con una nueva serie llena de semillas de fe.