Deuteronomio 32: La canción de advertencia.
Descarga y escucha en cualquier lugar
Descarga tus episodios favoritos y disfrútalos, ¡dondequiera que estés! Regístrate o inicia sesión ahora para acceder a la escucha sin conexión.
Descripción
Notas en Español e inglés 👇 Deuteronomio 32:4-15 RVA2015: “Él es la Roca, cuya obra es perfecta, porque todos sus caminos son rectitud. Él es un Dios fiel, en quien...
mostra másDeuteronomio 32:4-15 RVA2015:
“Él es la Roca, cuya obra es perfecta, porque todos sus caminos son rectitud. Él es un Dios fiel, en quien no hay iniquidad; es justo y recto. La corrupción no es suya; de sus hijos es la mancha, generación torcida y perversa. ¿Así pagan al SEÑOR, pueblo necio e insensato? ¿Acaso no es él tu Padre, tu Creador, quien te hizo y te estableció? “Acuérdate de los días antiguos; considera los años de muchas generaciones. Pregunta a tu padre, y él te declarará; a tus ancianos, y ellos te dirán. Cuando el Altísimo repartió heredades a las naciones, cuando separó a los hijos del hombre, estableció las fronteras de los pueblos según el número de los hijos de Israel. Porque la porción del SEÑOR es su pueblo; Jacob es la parcela de su heredad. “Lo halló en tierra desértica, en medio de la soledad rugiente del desierto. Lo rodeó, lo cuidó, lo guardó como a la niña de sus ojos; como el águila que agita su nidada, revolotea sobre sus polluelos, extiende sus alas, los toma, y los lleva sobre sus plumas. El SEÑOR solo lo guió; no hubo dioses extraños con él. Lo hizo cabalgar sobre las alturas de la tierra y lo hizo comer los productos del campo. Hizo que chupara miel de la peña, aceite del duro pedernal, mantequilla de las vacas, leche de las ovejas, con sebo de corderos y carneros, y machos cabríos de Basán. Con lo mejor del trigo y de la sangre de uvas bebiste vino. “Jesurún se engordó y dio coces. (Te hiciste gordo, grueso y rollizo). Y abandonó al Dios que lo hizo; desdeñó a la Roca de su salvación.
--------------------------------------------------------
Casi todo el capítulo está lleno de versos del cántico de Moisés. Cuando Moisés profetizó al pueblo que ellos más adelante iban a dejar al Señor, se iba a alejar de sus mandamientos por ir detrás de otros dioses, Dios le dio a Moisés los versos de un cántico que ellos debían escuchar y aprender como símbolo de advertencia de lo que les vendría.
Ayer leímos que Dios conoce la intención del corazón, las predisposiciones del pueblo al inclinarse al mal cuando tuvieran abundancia, y este canto es una profecía de cómo sería ese proceso hacia la desobediencia y su posterior destrucción.
Todo comenzó cuando ellos olvidaron dónde estaban fundamentados. Se salieron de la Roca de salvación que los libró de la esclavitud, la Roca de bendición y provisión que les dió alimento en el desierto y una tierra de abundancia. Se llenaron de arrogancia, fueron olvidadizos y malagradecidos. El Señor les dijo que les faltó sentido común; leamos los versos 28 al 31: “Son un pueblo al cual le falta juicio; no hay en ellos entendimiento. Si fueran sabios, entenderían esto; comprenderían cuál sería su final. ¿Cómo podrá perseguir uno a mil? ¿Cómo harán huir dos a diez mil, si su Roca no los hubiera vendido, si el SEÑOR no los hubiera entregado? La roca de ellos no es como nuestra Roca; nuestros mismos enemigos lo han de reconocer.”
¡No vieron que todo lo que ellos son es gracias a la forma milagrosa en que Dios los ha bendecido y protegido! Se olvidaron quién es el que los cubría con una cobertura especial.
Además, aquí vemos la palabra profética de que Dios alcanzaría a los gentiles después de que ellos rechazaran al Señor en el verso 21: “Ellos me provocaron a celos con lo que no es Dios; me indignaron con sus vanidades. También yo los provocaré a celos con uno que no es pueblo; con una nación insensata les causaré indignación."
Al final del capítulo, Moisés les dio las últimas palabras de consejo antes de partir de este mundo, y les advierte que ahora la bendición dependerá de ellos de su fidelidad a Dios guardando sus mandamientos. Leamos lo que él les dijo en los versos 46 al 47: “Apliquen su corazón a todas las palabras con que yo les advierto hoy, para que las encarguen a sus hijos a fin de guardar y poner por obra todas las palabras de esta ley. Porque no son palabras vanas; pues son la vida de ustedes, y a causa de estas palabras prolongarán sus días en la tierra que para tomarla en posesión cruzan el Jordán”.
Espero que esta canción sirva de advertencia a nosotros también, para que vivamos agradando a Jesucristo continuamente, y no dejándonos arrastrar por la abundancia y seguridad que estemos experimentando, pensando que no importa lo que hagamos, pues estamos cómodos tratando de satisfacer nuestros deseos y de vivir guiados por nuestros sentimientos.
Guiemos a nuestros hogares a cimentarse en la Roca que es Jesucristo.
Que el Señor escuche tu oración y que nunca olvides esta canción de advertencia.
Soy tu hermano Eduardo Rodriguez
🇺🇲
Deuteronomio 32:4-15 RVA2015:
“Él es la Roca, cuya obra es perfecta, porque todos sus caminos son rectitud. Él es un Dios fiel, en quien no hay iniquidad; es justo y recto. La corrupción no es suya; de sus hijos es la mancha, generación torcida y perversa. ¿Así pagan al SEÑOR, pueblo necio e insensato? ¿Acaso no es él tu Padre, tu Creador, quien te hizo y te estableció? “Acuérdate de los días antiguos; considera los años de muchas generaciones. Pregunta a tu padre, y él te declarará; a tus ancianos, y ellos te dirán. Cuando el Altísimo repartió heredades a las naciones, cuando separó a los hijos del hombre, estableció las fronteras de los pueblos según el número de los hijos de Israel. Porque la porción del SEÑOR es su pueblo; Jacob es la parcela de su heredad. “Lo halló en tierra desértica, en medio de la soledad rugiente del desierto. Lo rodeó, lo cuidó, lo guardó como a la niña de sus ojos; como el águila que agita su nidada, revolotea sobre sus polluelos, extiende sus alas, los toma, y los lleva sobre sus plumas. El SEÑOR solo lo guió; no hubo dioses extraños con él. Lo hizo cabalgar sobre las alturas de la tierra y lo hizo comer los productos del campo. Hizo que chupara miel de la peña, aceite del duro pedernal, mantequilla de las vacas, leche de las ovejas, con sebo de corderos y carneros, y machos cabríos de Basán. Con lo mejor del trigo y de la sangre de uvas bebiste vino. “Jesurún se engordó y dio coces. (Te hiciste gordo, grueso y rollizo). Y abandonó al Dios que lo hizo; desdeñó a la Roca de su salvación.
--------------------------------------------------------
Casi todo el capítulo está lleno de versos del cántico de Moisés. Cuando Moisés profetizó al pueblo que ellos más adelante iban a dejar al Señor, se iba a alejar de sus mandamientos por ir detrás de otros dioses, Dios le dio a Moisés los versos de un cántico que ellos debían escuchar y aprender como símbolo de advertencia de lo que les vendría.
Ayer leímos que Dios conoce la intención del corazón, las predisposiciones del pueblo al inclinarse al mal cuando tuvieran abundancia, y este canto es una profecía de cómo sería ese proceso hacia la desobediencia y su posterior destrucción.
Todo comenzó cuando ellos olvidaron dónde estaban fundamentados. Se salieron de la Roca de salvación que los libró de la esclavitud, la Roca de bendición y provisión que les dió alimento en el desierto y una tierra de abundancia. Se llenaron de arrogancia, fueron olvidadizos y malagradecidos. El Señor les dijo que les faltó sentido común; leamos los versos 28 al 31: “Son un pueblo al cual le falta juicio; no hay en ellos entendimiento. Si fueran sabios, entenderían esto; comprenderían cuál sería su final. ¿Cómo podrá perseguir uno a mil? ¿Cómo harán huir dos a diez mil, si su Roca no los hubiera vendido, si el SEÑOR no los hubiera entregado? La roca de ellos no es como nuestra Roca; nuestros mismos enemigos lo han de reconocer.”
¡No vieron que todo lo que ellos son es gracias a la forma milagrosa en que Dios los ha bendecido y protegido! Se olvidaron quién es el que los cubría con una cobertura especial.
Además, aquí vemos la palabra profética de que Dios alcanzaría a los gentiles después de que ellos rechazaran al Señor en el verso 21: “Ellos me provocaron a celos con lo que no es Dios; me indignaron con sus vanidades. También yo los provocaré a celos con uno que no es pueblo; con una nación insensata les causaré indignación."
Al final del capítulo, Moisés les dio las últimas palabras de consejo antes de partir de este mundo, y les advierte que ahora la bendición dependerá de ellos de su fidelidad a Dios guardando sus mandamientos. Leamos lo que él les dijo en los versos 46 al 47: “Apliquen su corazón a todas las palabras con que yo les advierto hoy, para que las encarguen a sus hijos a fin de guardar y poner por obra todas las palabras de esta ley. Porque no son palabras vanas; pues son la vida de ustedes, y a causa de estas palabras prolongarán sus días en la tierra que para tomarla en posesión cruzan el Jordán”.
Espero que esta canción sirva de advertencia a nosotros también, para que vivamos agradando a Jesucristo continuamente, y no dejándonos arrastrar por la abundancia y seguridad que estemos experimentando, pensando que no importa lo que hagamos, pues estamos cómodos tratando de satisfacer nuestros deseos y de vivir guiados por nuestros sentimientos.
Guiemos a nuestros hogares a cimentarse en la Roca que es Jesucristo.
Que el Señor escuche tu oración y que nunca olvides esta canción de advertencia.
Soy tu hermano Eduardo Rodriguez
#Deuteronomio #Deuteronomio32
#IglesiaElReino #KingdomChurch #IPUH
#HogaresDePacto #HogaresDePactoPodcast #PastorCarlos #CarlosRodriguez #EduardoRodriguez
Información
Autor | PODERcaster Studio |
Organización | PODERcaster Studio |
Página web | - |
Etiquetas |
Copyright 2024 - Spreaker Inc. an iHeartMedia Company
Comentarios