Notas. Inglés y Español ⬇️
December 10: The greatness of God in the creation.

Psalms 104:10-35:
He sends the springs into the valleys; they flow among the hills. They give drink to every beast of the field; the wild donkeys quench their thirst. By them the birds of the heavens have their home; they sing among the branches. He waters the hills from His upper chambers; the earth is satisfied with the fruit of Your works. He causes the grass to grow for the cattle, and vegetation for the service of man, that he may bring forth food from the earth, and wine that makes glad the heart of man, oil to make his face shine, and bread which strengthens man’s heart. The trees of the Lord are full of sap, the cedars of Lebanon which He planted, where the birds make their nests; the stork has her home in the fir trees. The high hills are for the wild goats; the cliffs are a refuge for the rock badgers. He appointed the moon for seasons; the sun knows its going down. You make darkness, and it is night, in which all the beasts of the forest creep about. The young lions roar after their prey, and seek their food from God. When the sun rises, they gather together and lie down in their dens. Man goes out to his work and to his labor until the evening. O Lord, how manifold are Your works! In wisdom You have made them all. The earth is full of Your possessions— this great and wide sea, in which are innumerable teeming things, living things both small and great. There the ships sail about; there is that Leviathan which You have made to play there. These all wait for You, that You may give them their food in due season. What You give them they gather in; You open Your hand, they are filled with good. You hide Your face, they are troubled; You take away their breath, they die and return to their dust. You send forth Your Spirit, they are created; and You renew the face of the earth. May the glory of the Lord endure forever; may the Lord rejoice in His works. He looks on the earth, and it trembles; He touches the hills, and they smoke. I will sing to the Lord as long as I live; I will sing praise to my God while I have my being. May my meditation be sweet to Him; I will be glad in the Lord. May sinners be consumed from the earth, and the wicked be no more. Bless the Lord, O my soul! Praise the Lord!

This is one of those psalms eloquently written exalting the Creator. If you read the entire psalm in detail, you will notice how the psalmist was looking at the way creation is connected to one another. He detailed how everything that has been formed has a specific purpose for living things to subsist on earth.
It is wonderful to read the way the psalmist saw the heaven and earth established. How everything has its specific and perfect place: the springs, the mountains, the sea, etc. Also how animals are satiated and cared for by the Almighty.
On the contrary, when God moves His hand to punish the earth, the creatures easily vanish.

This is a very beautiful read, especially for those who like the subject of Natural Sciences or Biology. With this psalm we can see that the sciences were very advanced in ancient times. Many kings used their position to bring scientists of the time to their court and thus they too learned a lot about nature. For example, Solomon was one of them.
And science, instead of denying God as some think, rather confirms that the ancestors were not wrong in declaring that only one Creator could have made all these things and they were not made from nothing.

I hope this psalm has filled you with faith and trust in the One who made all these wonderful creations, and who is the same One who called you, chose you and your family to be in His presence.

Consider this:
Have you received any revelation from God while admiring His creation?

I am your brother and friend Eduardo Rodríguez. May the Lord hear your prayer today.

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Diciembre 10: La grandeza de Dios en la creación.

Salmos 104:10‭-‬35 RVA2015:
Tú eres el que vierte los manantiales en los arroyos; corren entre las colinas. Dan de beber a todos los animales del campo; los asnos monteses mitigan su sed. Junto a ellos habitan las aves del cielo y trinan entre las ramas. Tú das de beber a las montañas desde tus altas moradas; del fruto de tus obras se sacia la tierra. Haces producir el pasto para los animales y la vegetación para el servicio del hombre a fin de sacar de la tierra el alimento: el vino que alegra el corazón del hombre, el aceite que hace lucir su rostro, y el pan que sustenta el corazón del hombre. Se llenan de savia los árboles del SEÑOR; los cedros del Líbano que él plantó. Allí anidan las aves; en sus copas hace su nido la cigüeña. Los montes altos son para las cabras monteses; las peñas, para las madrigueras de los conejos. Tú eres el que hizo la luna para las estaciones; el sol conoce su ocaso. Pones las tinieblas, y es de noche; en ella corretean todos los animales silvestres. Los leones rugen por la presa y reclaman a Dios su comida. Sale el sol; se recogen y se echan en sus cuevas. Sale el hombre a su labor y a su labranza hasta el anochecer. ¡Cuán numerosas son tus obras, oh SEÑOR! A todas las hiciste con sabiduría; la tierra está llena de tus criaturas. Este es el mar grande y ancho, en el cual hay peces sin número, animales grandes y pequeños. Sobre él van los navíos; allí está el Leviatán que hiciste para que jugase en él. Todos ellos esperan en ti para que les des su comida a su tiempo. Tú les das, y ellos recogen; abres tu mano, y se sacian del bien. Escondes tu rostro, y se desvanecen; les quitas el aliento, y dejan de ser. Así vuelven a ser polvo. Envías tu hálito, y son creados; y renuevas la superficie de la tierra. ¡Sea la gloria del SEÑOR para siempre! Alégrese el SEÑOR en sus obras. Él mira la tierra, y ella tiembla; toca las montañas, y humean. Cantaré al SEÑOR en mi vida; a mi Dios cantaré salmos mientras viva. Que mi meditación le sea grata y que yo me alegre en el SEÑOR. Sean exterminados de la tierra los pecadores, y los impíos dejen de ser. ¡Bendice, oh alma mía, al SEÑOR! ¡Aleluya!


Este es uno de esos salmos escritos de forma elocuente exaltando al Creador. Si lees detalladamente todo el salmo, vas a notar cómo el salmista estaba mirando la forma en que la creación está conectada de una con otra. Él detalló cómo todo lo que ha sido formado tiene un propósito específico para que los seres vivientes subsistan sobre la Tierra.
Es maravilloso leer la forma en que el salmista veía los cielos y la tierra establecidos. Cómo tiene todo su lugar específico y perfecto: los manantiales, las montañas, el mar. También cómo los animales se sacian y son cuidados por el Todopoderoso.
De forma contraria, cuando Dios mueve su mano para castigar la tierra, fácilmente las criaturas se desvanecen.

Esta es una lectura muy bonita, especialmente para aquellos que les gusta la materia de Ciencias Naturales o Biología. Con este salmo podemos mirar que las ciencias eran muy avanzadas en la antigüedad. Muchos reyes utilizaban su posición para traer a su corte los científicos de la época y así ellos también aprendían mucho sobre la naturaleza. Por ejemplo, Salomón era uno de ellos.
Y la ciencia, en vez de negar a Dios como algunos piensan, más bien nos confirma que los antepasados no estaban equivocados al declarar que solamente un Creador puede haber hecho de todas estas cosas y no se hicieron de la nada.

Espero que este salmo te haya llenado de fe y confianza en Aquel que hizo todas estas creaciones maravillosas, y que es el mismo que te llamó, te escogió a ti y a tu familia para estar en su presencia.
Considera:
¿Has recibido alguna revelación de Dios al admirar su creación?

Soy tu hermano y amigo Eduardo Rodríguez. Que el Señor escuche hoy tu oración.

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