LOS DOS MUNDOS - Psicología Revolucionaria - Samael Aun Weor - Audiolibro Capítulo 20
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Descripción
Escrito por el maestro Samael Aun Weor Narración por Parsifal Flores Aguila en esta pagina encontraras la libreria de estos libros completos https://www.AudiolibrosGnosis.com Encuentra el libro completo en youtube en...
mostra másNarración por Parsifal Flores Aguila
en esta pagina encontraras la libreria de estos libros completos https://www.AudiolibrosGnosis.com
Encuentra el libro completo en youtube en este enlace https://www.youtube.com/watch?v=YntE6vwjN2U&list=PL9jMDpCQi6Nr18KMMKxddXEjXPXBstpg0
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Observar y observarse a sí mismo son dos cosas completamente diferentes, sin
embargo, ambas exigen atención.
En la observación la atención es orientada hacia afuera, hacia el mundo exterior, a
través de las ventanas de los sentidos.
En la auto-observación de sí mismo, la atención es orientada hacia dentro y para ello
los sentidos de percepción externa no sirven, motivo éste más que suficiente como para que
sea difícil al neófito la observación de sus procesos psicológicos íntimos.
El punto de partida de la ciencia oficial en su lado práctico, es lo observable. El punto
de partida del trabajo sobre sí mismo, es la auto-observación, lo auto-observable.
Incuestionablemente estos dos puntos de partida renglones arriba citados, nos llevan
a direcciones completamente diferentes.
Podría alguien envejecer enfrascado entre los dogmas transigentes de la ciencia
oficial, estudiando fenómenos externos, observando células, átomos, moléculas, soles,
estrellas, cometas, etc., sin experimentar dentro de sí mismo ningún cambio radical.
La clase de conocimiento que transforma interiormente a alguien, jamás podría
lograrse mediante la observación externa.
El verdadero conocimiento que realmente puede originar en nosotros un cambio
interior fundamental tiene por basamento la auto-observación directa de sí mismo.
Es urgente decirle a nuestros estudiantes Gnósticos que se observen a sí mismos y en
que sentido deben auto-observarse y las razones para ello.
La observación es un medio para modificar las condiciones mecánicas del mundo. La
auto-observación Interior es un medio para cambiar íntimamente.
Como secuencia o corolario de todo esto, podemos y debemos afirmar en forma
enfática, que existen dos clases de conocimiento, el externo y el interno y que a menos que
tengamos en si mismos el centro magnético que pueda diferenciar las calidades del
conocimiento, esta mezcla de los dos planos u órdenes de ideas podrían llevarnos a la
confusión.
Sublimes Doctrinas seudo-esotéricas con marcado cientificismo de fondo, pertenecen
al terreno de lo observable, sin embargo son aceptadas por muchos aspirantes como
conocimiento interno.
Nos encontramos pues ante dos mundos, el exterior y el interior. El primero de estos
es percibido por los sentidos de percepción externa; el segundo sólo puede ser perceptible
mediante el sentido de auto-observación interna
Pensamientos, ideas, emociones, anhelos, esperanzas, desengaños, etc., son
interiores, invisibles para los sentidos ordinarios, comunes y corrientes y sin embargo son
para nosotros más reales que la mesa del comedor o los sillones de la sala.
Ciertamente nosotros vivimos más en nuestro mundo interior que en el exterior; esto
es irrefutable, irrebatible.
En nuestros Mundos Internos, en nuestro mundo secreto, amamos, deseamos,
sospechamos, bendecimos, maldecimos, anhelamos, sufrimos, gozamos, somos
defraudados, premiados, etc., etc., etc.
Incuestionablemente los dos mundos interno y externo son verifícables
experimentalmente. El mundo exterior es lo observable. El mundo interior es lo autoobservable en sí mismo y dentro de sí mismo, aquí y ahora.
Quien de verdad quiera conocer los "Mundos Internos" del planeta Tierra o del
Sistema Solar o de la Galaxia en que vivimos, debe conocer previamente su mundo íntimo,
su vida interior, particular, sus propios "Mundos Internos". "Hombre, conócete a ti mismo y
conocerás al Universo y a los Dioses".
Cuanto más se explore este "Mundo Interior" llamado "Uno Mismo", tanto mas
comprenderá que vive simultáneamente en dos mundos, en dos realidades, en dos ámbitos,
el exterior y el interior.
Del mismo modo que a uno le es indispensable aprender a caminar en el "mundo
exterior", para no caer en un precipicio, no extraviarse en las calles de la ciudad, seleccionar
sus amistades, no asociarse con perversos, no comer veneno, etc., así también mediante el
trabajo psicológico sobre si mismo, aprendamos a caminar en el "Mundo Interior" el cual es
explorable mediante la auto-observación de sí.
Realmente el sentido de auto-observación de sí mismo se encuentra atrofiado en la
raza humana decadente de esta época tenebrosa en que vivimos.
A medida que nosotros perseveramos en la auto-observación de sí mismos, el sentido
de auto-observación íntima se irá desarrollando progresivamente
Información
Autor | Parsifal Flores |
Organización | Parsifal Flores |
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