Los riesgos geopolíticos, el cambio de ciclo con los tipos de interés, las elecciones en EEUU, el temor a un aterrizaje no tan suave como se espera de la economía global... Las amenazas que enfrentan los mercados -y el planeta en general- en las próximas semanas y meses son casi incuantificables. Sin embargo, los parqués de Europa y EEUU no están reaccionando con temor. Y los inversores tampoco deberían tenerlos si son capaces de seguir al pie de la letra una hoja de ruta en la que se incluyan los niveles de stop óptimos en los que vender si los bajistas toman el control.Así lo explica Joan Cabrero en su comentario estratégico semanal y en el último episodio del podcast Estrategia de Mercado en el que el experto muestra su confianza en que el Russell 2000 siga la estela de sus compatriotas, el Nasdaq, el S&P 500 y el Dow Jones Industrial, que ya lograron recuperar los niveles alcanzados en 2021."Mi recomendación ha sido confiar en la sólida tendencia alcista de fondo, aprovechando las caídas que vimos en septiembre y agosto para comprar. Sigo insistiendo en que no habrá motivos de preocupación mientras no se pierdan soportes clave, como los mínimos de septiembre (que he denominado línea amarilla) y los de agosto (línea roja)", explica el analista técnico.Sin embargo, el experto añade un nuevo nivel para vigilar en el corto plazo: "los mínimos de octubre serán la nueva línea amarilla, los de septiembre pasarán a ser la línea naranja, y los de agosto mantendrán su estatus como línea roja", explica.En este contexto, solo se puede hablar de debilidad y agotamiento comprador a corto plazo si los índices pierden esas líneas. "Operativamente", destaca el analista "la estrategia que sugiero es hacer lo que llamo el acordeón con la exposición, es decir, ir aumentando a medida que los precios siguen al alza y reducirla a medida que estos soportes fueran cediendo"Mientras eso no ocurra, habrá mantener una exposición alta a bolsa hasta que el Russell 2000 alcance sus altos de 2021. Una vez cumplido ese objetivo, será el momento adecuado para recoger beneficios parciales, especialmente en aquellas empresas que han experimentado subidas verticales en las últimas semanas.