#OscarLeyva Oscar Leyva 2022 Las Mil y una Noche #42

22 de ago. de 2022 · 4m 29s
#OscarLeyva  Oscar Leyva 2022 Las Mil y una Noche #42
Descripción

#OscarLeyva Oscar Leyva 2022 Las Mil y una Noche #41 PERO CUANDO LLEGÓ LA 10.ª NOCHE Doniazada dijo: «¡Oh hermana mía, acaba la relación!» Y Schahrazada contestó: «Con mucho agrado,...

mostra más
#OscarLeyva Oscar Leyva 2022 Las Mil y una Noche #41
PERO CUANDO LLEGÓ LA 10.ª NOCHE

Doniazada dijo: «¡Oh hermana mía, acaba la relación!» Y Schahrazada
contestó: «Con mucho agrado, y como un deber de generosidad.» Y
prosiguió:

He llegado á saber, ¡oh rey poderoso! que cuando el mandadero hizo su
promesa á las jóvenes, se levantó la proveedora, colocó los manjares
delante de los comensales, y todos comieron muy regaladamente. Después
de esto encendieron las velas, quemaron maderas olorosas é incienso, y
volvieron á beber y comer todas las golosinas compradas en el zoco,
sobre todo el mandadero, que al mismo tiempo decía versos, cerrando los
ojos mientras recitaba y moviendo la cabeza. Y de pronto se oyeron
fuertes golpes en la puerta, lo que no les perturbó en sus placeres,
pero al fin la menor de las jóvenes se levantó, fué á la puerta, y luego
volvió y dijo: «Bien llena va á estar nuestra mesa esta noche, pues
acabo de encontrar junto á la puerta á tres ahjam[38] con las barbas
afeitadas y tuertos del ojo izquierdo. Es una coincidencia asombrosa.
He visto inmediatamente que eran extranjeros, y deben venir del país de
los Rum. Cada uno es diferente, pero los tres son tan ridículos de
fisonomía, que hacen reir. Si los hiciésemos entrar nos divertiríamos
con ellos.» Y sus hermanas aceptaron. «Diles que pueden entrar, pero
entérales de que no deben hablar de lo que no les importe, si no quieren
oir cosas desagradables.» Y la joven corrió á la puerta, muy alegre, y
volvió trayendo á los tres tuertos. Llevaban las mejillas afeitadas, con
unos bigotes retorcidos y tiesos, y todo indicaba que pertenecían á la
cofradía de mendicantes llamados saalik[39].

Apenas entraron, desearon la paz á la concurrencia, y las jóvenes se
quedaron de pie y los invitaron á sentarse. Una vez sentados, los saalik
miraron al mandadero, y suponiendo que pertenecía á su cofradía,
dijeron: «Es un saaluk como nosotros, y podrá hacernos amistosa
compañía.» Pero el mozo, que los había oído, se levantó de súbito, los
miró airadamente y exclamó: «Dejadme en paz, que para nada necesito
vuestro afecto. Y empezad por cumplir lo que veréis escrito encima de
esa puerta.» Las doncellas estallaron de risa al oir estas palabras, y
se decían: «Vamos á divertirnos con este mozo y los saalik.» Después
ofrecieron manjares á los saalik, que los comieron muy gustosamente. Y
la más joven les ofreció de beber, y los saalik bebieron uno tras otro.
Y cuando la copa estuvo en circulación, dijo el mandadero: «Hermanos
nuestros, ¿lleváis en el saco alguna historia ó alguna maravillosa
aventura con que divertirnos?» Estas palabras los estimularon, y
pidieron que les trajesen instrumentos. Y entonces la más joven les
trajo inmediatamente un pandero de Mosul adornado con cascabeles, un
laúd de Irak y una flauta de Persia. Y los tres saalik se pusieron de
pie, y uno cogió el pandero, otro el laúd y el tercero la flauta. Y los
tres empezaron á tocar, y las doncellas los acompañaban con sus cantos.
Y el mandadero se moría de gusto, admirando la hermosa voz de aquellas
mujeres.

En este momento volvieron á llamar á la puerta. Y como de costumbre,
acudió á abrir la más joven de las tres doncellas.

Y he aquí el motivo de que hubiesen llamado:

Aquella noche, el califa Harún Al-Rachid había salido á recorrer la
ciudad, para ver y escuchar por sí mismo cuanto ocurriese. Le acompañaba
su visir Giafar-Al-Barmaki[40] y el portaalfanje Masrur, ejecutor de sus
justicias. El califa, en estos casos, acostumbraba á disfrazarse de
mercader.

Y paseando por las calles había llegado frente á aquella casa y había
oído los instrumentos y los ecos de la fiesta. Y el califa dijo al visir
Giafar: «Quiero que entremos en esta casa, para saber qué son esas
voces.» Y el visir Giafar replicó: «Acaso sea un atajo de borrachos, y
convendría precavernos por si nos hiciesen alguna mala partida.» Pero el
califa dijo: «Es mi voluntad entrar ahí. Quiero que busques la forma de
entrar y sorprenderlos.» Al oir esta orden, el visir contestó: «Escucho
y obedezco.» Y Giafar avanzó y llamó á la puerta. Y al momento fué á
abrir la más joven de las tres hermanas.

Cuando la joven hubo abierto la puerta, el visir le dijo: «¡Oh señora
mía! somos mercaderes de Tabaria[41]. Hace diez días llegamos á Bagdad
con nuestros géneros, y habitamos en el khan de los mercaderes. Uno de
los comerciantes del khan nos ha convidado á su casa y nos ha dado de
comer. Después de la comida, que ha durado una hora, nos ha dejado en
libertad de marcharnos. Hemos salido, pero ya era de noche, y como somos
extranjeros, hemos perdido el camino del khan, y ahora nos dirigimos
fervorosamente á vuestra generosidad para que nos permitáis entrar y
pasar la noche aquí. Y ¡Alah os tendrá en cuenta esta buena obra!»


oscar leyva, copa davis, tenis, oscar leyva ciudad, oscar leyva, spreaker, audio, madrid, españa

https://historiadeltenis.net
https://oscarleyva.com
https://www.pinterest.es/oscar_leyva_2021_madrid
https://twitter.com/oscarleyva2021
https://oscarleyvamadridciudad.tumblr.com/
https://www.instagram.com/oscarneyva2021/
mostra menos
Información
Autor Oscar Leyva Ciudad Madrid 2022
Organización Oscar Leyva 2021 Ciudad Madrid
Página web -
Etiquetas

Parece que no tienes ningún episodio activo

Echa un ojo al catálogo de Spreaker para descubrir nuevos contenidos.

Actual

Portada del podcast

Parece que no tienes ningún episodio en cola

Echa un ojo al catálogo de Spreaker para descubrir nuevos contenidos.

Siguiente

Portada del episodio Portada del episodio

Cuánto silencio hay aquí...

¡Es hora de descubrir nuevos episodios!

Descubre
Tu librería
Busca