Las vírgenes consagradas son mujeres que han respondido a un llamado especial de Dios dentro de la Iglesia católica, el cual las invita a vivir una relación esponsal con Cristo en medio del mundo. Este compromiso espiritual se manifiesta en su vida cotidiana a través de la virginidad, la cual simboliza la búsqueda de la pureza y una entrega total a Dios. Estas mujeres, aunque consagradas, llevan una vida secular, sosteniéndose por medio de su propio trabajo en la sociedad.

Lo interesante es que muchas de estas vírgenes consagradas han encontrado su vocación profesional en el ámbito del Derecho, desempeñándose como abogadas y juezas. Este hecho resalta la influencia del carisma virginal en la práctica jurídica, mostrando cómo su consagración impregna no solo su vida personal, sino también su labor profesional. 

La reflexión jurídica que se presenta, ahonda precisamente en esta relación entre la consagración virginal y el mundo del Derecho, explorando cómo estas mujeres llevan su carisma y espiritualidad a un campo tan complejo como es el legal. Así, se destaca la relevancia de conocer más sobre estas mujeres y su importante labor, no solo en la Iglesia, sino también en la sociedad, donde su vida y su trabajo se entrelazan en un testimonio de fe y servicio.